Sonata cogió su varita y dirigiéndose a su chistera con unas palabras mágicas sacó de ella una figura musical llamada negra.
-¡Qué bonita es!
-¡Qué cabecita más negra!, decían las notas entusiasmadas.
CANCIÓN DE LA NEGRA
La negra me gusta,
me gusta la negra.
Un paso da ella,
un paso dará.
Y cuando se cansa
ya de caminar,
coge su silencio
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu comentario!
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.